En estos tiempos de crisis, es importante tener en mente que puede que, en cualquier momento y por cualquier razón, se pierda el trabajo.
Entonces, surge la siguiente pregunta: ¿Cómo afrontar esa contrariedad? ¿Qué hacer para salir adelante en caso que suceda?
Si acabas de ser despedido (a) lo primero que debes pensar es que se trata de una oportunidad para crecer y aplicar las experiencias aprendidas en el plano profesional.
Luego es necesario iniciar la elaboración de un listado sobre tus fortalezas, oportunidades, debilidades y actitudes Con esto podrás saber cuáles son tus herramientas en cada área, si tienes el apoyo logístieo e intelectual para montar un negocio rápidamente y dedicarte el resto de tu vida a ello o si, por el contrario, deseas mejor encontrar otro empleo.
Mientras estés desempleado, es fundamental que cada día hagas este ejercicio porque de esto dependerá tu solvencia económica en el futuro.
Es importante también tomar acciones por tu cuenta y no contar con que terceras personas te ayuden en ese momento.
Claro está que el ahorro en tiempo de crisis es primordial, porque en ese periodo más que nunca tienes que presupuestar tus gastos para evitar malos ratos. Pensando en eso, es sano que hagas un presupuesto de los consumos que tienes mensualmente y, de paso, ordenarlos por prioridades. Cada gasto innecesario que saques de tus números es un ahorro, lo cual es la base de la fortuna.
Despilfarrar tu dinero no es una opción durante el desempleo si ansias mantenerte a flote; por ende, cada euro, dólar, etc. que gastes debes hacerlo con calculadora en mano para que no afectes tus planes inmediatos. Destina un porcentaje para transporte a entrevistas e impresiones de hojas de vida, si no consigues enviarlas a través de internet.
Aunque pocas veces se conoce con antelación que estarás desempleado, es primordial que lo tengas como una opción. Teniendo eso en mente, asesórate en los bancos cuáles seguros existen para el cese laboral, para que cubran los pagos de tarjetas de crédito, seguro y demás. La idea es que tus reservas no se destinen a eso en ese periodo de tu vida.
Y finalmente, si has decidido buscar otro empleo, no pospongas el tiempo para hacerlo, a menos que tengas lo suficiente como para espera sentada unos cuantos meses.
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