Cómo superar una crisis económica

Cuando ocurre una crisis económica, es necesario cambiar de mentalidad para afrontar de manera constructiva las dificultades surgidas. A continuación algunas recomendaciones que permiten superarla:

Estudiar los gastos: durante un mes, se debe anotar los gastos principales y valorar en qué aspectos se puede reducir la inversión económica. A partir de estos datos, se podrá elaborar un plan de ahorro adecuado a las necesidades.

Controlar las compras: Antes de ir a comprar, se debe hacer una lista de la compra valorando cuáles son las verdaderas necesidades intentando reducir los caprichos o gastos extras. Eso sí, nunca se debe escatimar en la salud.

No se debe esperar a que lo despidan: Si se siente inseguro en el trabajo. Se debe buscar nuevos puestos de empleo y valorar qué tipo de formación universitaria se requiere para acceder a aquellos puestos que se desean ocupar.

Valorar la crisis como algo temporal No se sienta "destinado" a vivir con el cinturón apretado toda la vida, sino sólo en un periodo de tiempo determinado.

Buscar un hobbie que a su vez permita ahorrar (senderismo, salir a andar o a correr, la lectura. ..). No acepte la expresión "no puedo hacer nada porque no tengo dinero". Las actividades gratificantes son muy importantes en nuestra vida para mantener un adecuado nivel emocional que nos permita tomar decisiones acertadas.

Hacer una valoración realista de la situación. Para ello, se debe intentar controlar las anticipaciones catastrofistas. No se debe entrar en la "neurosis de la crisis" fijándose sólo en los casos de bancarrota. Vive el presente controlando los gastos y valora tus propias circunstancias personales sin compararte con los demás.

No dudes en apoyarte en las redes sociales (familiares, amigos, etcétera) si crees que estos pueden ayudar tanto a nivel moral como económico a superar una mala racha.

Es necesario recordar que, en épocas de crisis, no hay que ganar más, sino gastar menos. Por eso, no se debe entrar en la trampa de trabajar horas y horas sin descansar "por lo que pueda venir", porque ello sólo deteriorará el organismo.