Los préstamos personales son, por lo general, el segundo producto de crédito de consumo favorito, posiblemente porque dan la facilidad de tener efectivo en mano.
Este efectivo puede ser usado para muchas finalidades (siempre y cuando sean para satisfacer una necesidad personal): hacer mejoras a la casa, consolidar deudas, financiar los estudios y más.
Al buscar un préstamo personal, es vital que se haga una ardua búsqueda y comparación, pues la oferta en este producto de crédito es amplia.
Es importante comparar tasas de interés, plazo, letra mensual y monto a recibir, pues regularmente, la entidad que otorga el crédito, resta del dinero solicitado algunos gastos administrativos y legales.
Analiza el plazo al que una entidad te otorga el préstamo, sea adecuado para el monto solicitado. Es decir, que el plazo no sea 7 años si vas a pedir 2,000 solamente o que sea un plazo de 2 años si vas a pedir 10,000.
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